A casi dos semanas después de su arribo de los últimos Juegos Olímpicos, quien seguramente es el ecuatoriano más notable a nivel mundial, en todos lo tiempos, ha recibo un frío homenaje de parte del Gobierno ecuatoriano.
Posiblemente quienes en su vida no han practicado un deporte competitivamente y han representado al Ecuador fuera de sus fronteras no lleguen a comprender la hazaña y sacrificio que ha hecho este hombre.
Pero Perez no solo tiene lo dones de un gran deportista sino que tiene cualidades de un verdadero líder, aquí algunas de ellas: humilde pero no acomplejado; valiente, sin llegar a la arrogancia; con carácter, sin ser irrespetuoso; integro y capaz de discrepar sin descalificar a sus oponentes.
Que contraste con aquellos lideres que gritan y vociferan, que se pelean con todo el que no comulgue con sus ideas. Que diferencia con aquellos que llegaron al poder y dijeron no pertenecer a la misma clase política tradicional. Sin embargo lo que vemos hoy es un poco de lo mismo solo que con distinto protagonista y aderezado con más prepotencia y envanecimiento.
Mientras, el Ecuador sigue a la deriva con un costo de vida cada día más alto, sin fuentes de trabajo, los más necesitados del país a la espera de unas dádivas de parte del Gobierno Nacional y lo peor, creyendo que una nueva Constitución va a cambiarles la vida.
Lo bueno en medio de este panorama sombrío es que tenemos a ecuatorianos como Jefferson Perez dándonos ejemplo de lo que es un verdadero líder. Felicidades Jefferson!
Angela Lopez de Candage
Florida, USA
